El primero Concurso de Saltos de Vimeiro tuvo lugar en 1979 por iniciativa de Carlos Belchior junto con un grupo de amigos.

 

La falta de instalaciones, unido a las fuertes lluvias caídas durante la víspera del concurso, obligó a utilizar el campo de golf como escenario para la prueba. Dicha decisión fue del agrado de los jinetes aunque originó, durante varias semanas fuertes protestas de los golfistas debido a la imposibilidad de utilizar los principales hoyos del campo.

 

La belleza del lugar, la hospitalidad de las gentes y el buen ambiente vividos en el Hotel Golf Mar hizo que junto con la presencia de los mejores jinetes de entonces y la gran experiencia de Major Joaquim Simões Pereira, el Concurso tuviese un gran éxito.

 

Aunque la experiencia no fue del agrado de los hasta entonces organizadores, durante un periodo de seis años, no se realizó ningún evento hípico en la zona, hasta que en 1985 la presión ejercida por algunos aficionados hizo que la prueba volviese a repetirse sin interrupción hasta nuestros días.

 

Los primeros años no fueron fáciles, el piso era de tierra arcillosa, las condiciones de alojamiento de los caballos no eran las más adecuadas y se recurría al Centro Militar de Mafra para obtener el material del concurso. Con los años la prueba ganó nombre y prestigio y las instalaciones se fueron mejorando. Se construyó un campo de pruebas de césped con piso blando y elástico, considerado como uno de los mejores del país, “boxes” móviles, excelentes condiciones sanitarias, grandes zonas para el estacionamiento de camiones y rulotes, un variado parque de obstáculos donde destacan los famosos molinos que tanto miedo causaron de inicio, etc.

 

Ha quedado para la historia el robo de la “Campana”, ocurrido en 1985. La reliquia histórica de bronce pertenecía al Centro Militar de Mafra y fue prestada para ser  utilizada por el juez de la prueba. El robo se produjo el primer día de concurso y fue puesto de inmediato en conocimiento de las autoridades. Las investigaciones que se realizaron en el lugar no dieron resultado, aunque semanas más tarde la “Campana” se encontró en una caja dentro de la Finca de Marinha, sin llegar a saber nunca quién pudo estar detrás del robo.

 

Las constates mejoras en las instalaciones, junto con los elogios recibidos de importantes jinetes extranjeros que han participado en él, han ayudado a que el Concurso de Vimerio se haya convertido en uno de los más importantes eventos del calendario nacional. 

 

Debido al maravilloso paraje en el que se ubica el Concurso entre el mar y la montaña, muchos de los jinetes que en él han participado disfrutaron de unos días de ocio junto a sus familiares durante la época del concurso.

 

Desde Octubre de 2001 la nueva Administración está introduciendo mejoras significativas en las instalaciones, y por ello no es difícil imaginar que pronto el Concurso de Saltos de Vimeiro esté al más alto nivel internacional.